Una persona fue detenida el pasado miércoles por dar una paliza a una empleada
de la oficina del Banco Santander en Can Picafort (Mallorca). Según testigos,
el agresor la atacó porque la empleada se negó a entregarle la tarjeta de
crédito que el cliente solicitaba.
Ante la negativa, el individuo se comenzó a poner cada vez más
nervioso, gritando a la trabajadora y llegando a zarandearla y a agredirla.
La trabajadora agredida fue atendida en el propio lugar de los hechos por médicos del PAC de la localidad y por el 061. También hicieron acto de presencia las fuerzas del orden, tanto la Policía Local como la Guardia Civil.
Este hecho, que podría parecer esporádico, desgraciadamente no es así. Desde hace tiempo nuestros compañeros de UGT en Málaga tiene presentadas bastantes denuncias por agresiones, verbales y físicas en oficinas de la provincia. A pesar de que la Inspección de Trabajo de Málaga ha requerido a la empresa para que efectué diversas actuaciones preventivas, ésta intenta torear la situación con dilaciones, poniendo con su actuación en riesgo la integridad de los empleados de la plaza.
Que al banco le importamos un "carajo" es fácilmente visible cuando deja en alguna oficina a un/a solo/a empleado/a. ¿Que pasaría, que ya ha pasado alguna vez, si alguien la emprende contra el/la trabajador/a?. Pues sencillamente, que al encontrarse solo/a está a merced de lo que el agresor quiera hacer con el/ella.
A estas horas, la empresa todavía no ha comunicado este incidente al Comité Estatal de Seguridad y Salud del Banco Santander. Este es el respeto que tiene esta empresa a organismos que velan por la salud y la seguridad de los trabajadores.
La trabajadora agredida fue atendida en el propio lugar de los hechos por médicos del PAC de la localidad y por el 061. También hicieron acto de presencia las fuerzas del orden, tanto la Policía Local como la Guardia Civil.
Este hecho, que podría parecer esporádico, desgraciadamente no es así. Desde hace tiempo nuestros compañeros de UGT en Málaga tiene presentadas bastantes denuncias por agresiones, verbales y físicas en oficinas de la provincia. A pesar de que la Inspección de Trabajo de Málaga ha requerido a la empresa para que efectué diversas actuaciones preventivas, ésta intenta torear la situación con dilaciones, poniendo con su actuación en riesgo la integridad de los empleados de la plaza.
Que al banco le importamos un "carajo" es fácilmente visible cuando deja en alguna oficina a un/a solo/a empleado/a. ¿Que pasaría, que ya ha pasado alguna vez, si alguien la emprende contra el/la trabajador/a?. Pues sencillamente, que al encontrarse solo/a está a merced de lo que el agresor quiera hacer con el/ella.
A estas horas, la empresa todavía no ha comunicado este incidente al Comité Estatal de Seguridad y Salud del Banco Santander. Este es el respeto que tiene esta empresa a organismos que velan por la salud y la seguridad de los trabajadores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario