Un estudio del FMI sobre el desempleo juvenil en las economías avanzadas
europeas muestra que el pensamiento de los especialistas de la organización no
ha cambiado con la incipiente salida de la crisis: sus recetas pasan por el
abaratamiento de los costes para los empresarios y la rebajas: en este caso,
del salario mínimo y de las indemnizaciones por despido de los indefinidos.
El estudio señala que ha sido la crisis y el desplome de crecimiento el
principal responsable del repunte del desempleo juvenil en Europa y en España,
y que será el crecimiento el principal factor que pueda ayudar a revertir la
situación. Dicho esto, no obstante, el texto se centra en dar una serie de
recomendaciones de reformas que abundan en la línea que ha venido defendiendo
la institución desde el comienzo de la crisis.
El documento explica que, se ha venido produciendo una caída de los
salarios medianos mientras que no ha sucedido lo mismo con los salarios
mínimos. Como los perceptores de éstos son en buena medida jóvenes, lo que proponen
estos economistas del Fondo es “alinear” (esto es, bajar) el salario mínimo
“para que los costes laborales [que suponen contratar a este tipo de empleados]
no sean excesivos en relación con los de otros trabajadores”. “Si los costes
laborales del conjunto de la economía se reducen, mantener sin cambios los
salarios mínimos haría relativamente más caro contratar a los jóvenes que
cobran ese tipo de sueldos”, continúa el texto; “el grueso del ajuste recaería
así sobre los trabajadores jóvenes”.
Los autores se sirven de un razonamiento similar
para recomendar “reducir la dualidad” en el mercado de trabajo (aproximar los
costes del despido de los empleados indefinidos al de los temporales). Esto
podría estimular la contratación indefinida de jóvenes que ahora tienen en
muchos casos contrato temporal, argumentan. También creen que reducir las
cotizaciones empresariales animaría a las compañías a contratar, y que
“reformar las prestaciones de desempleo” podría “incentivar mejor el paso de la
inactividad al empleo”. Menos derechos y menos prestaciones, en suma, en línea
con las recomendaciones del FMI en los últimos años para España y Europa.
Sería sumamente didáctico saber que sueldos tienen estos personajes, que se atreven a recetar miseria a los demás. Estos espabilados quieren condenar a la juventud a salarios ultramíseros, mientras permanecen impertérritos ante sueldos como los que anunciábamos ayer en el blog de la cúpula del Santander.
Sería sumamente didáctico saber que sueldos tienen estos personajes, que se atreven a recetar miseria a los demás. Estos espabilados quieren condenar a la juventud a salarios ultramíseros, mientras permanecen impertérritos ante sueldos como los que anunciábamos ayer en el blog de la cúpula del Santander.
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