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El pasado mes de mayo,
la sección sindical Provincial de UGT Banco Santander presentó denuncia de
forma individual contra todas y cada una de las sucursales de Banco Santander
de Huelva y provincia, manifestando en cada escrito “las continuas y
reiteradas prolongaciones de jornada laboral que se producen en los centros de
trabajo”.
Según el texto de
las denuncias, estas horas extraordinarias, que además exceden del límite
máximo legal establecido en el Estatuto de los Trabajadores, “son
realizadas bajo la presión diaria a la que se ven sometidos todos los
empleados. Estas horas extraordinarias ni se compensan por periodos de
descanso, ni se abonan económicamente y por tanto tampoco son cotizadas en
nómina, por lo que podría existir un presunto fraude a la Seguridad Social”.
Tras la labor de
investigación, llevada a cabo por la Inspección de Trabajo, durante los
últimos tres meses, y examinada la documentación aportada por Banco Santander,
según hemos denunciado desde UGT, se ha concluido con “la inexistencia de registro de
jornada laboral, según lo establecido en el art. 35.5 del Estatuto de los
Trabajadores” y el reconocimiento de “la existencia de horas de trabajo en
horario de tarde”.
No obstante, “tras la recepción de las actas oficiales de infracción, Banco
Santander continua sin registrar la jornada laboral, puesto que le resulta
mucho más rentable pagar la sanción de, que cotizar por las horas
extraordinarias reales a la Seguridad Social”.
Este modelo
organizativo que se caracteriza principalmente por el descontrol de horario,
debería de suponer una alerta máxima para los gobiernos central y autonómico,
no sólo por el dinero dejado de recaudar, sino que además, eclipsa la necesidad
de crear empleo en este país. Ante tal escenario, nos cuestionamos, como una
empresa como Banco Santander puede ser acreditada con el certificado EFR
(Empresa Familiarmente Responsable), cuando sus empleados tienen que pasar
aproximadamente doce horas al día en la oficina, y se sienten presionados
continuamente, con traslados fuera de sus domicilios de residencia si dejan
de trabajar en horario de tarde, siendo esta política justo el polo opuesto de
lo que se entiende por conciliación de la vida laboral y familiar.
Aquí, seguimos esperando noticias de la denuncia que pusimos el 2 de octubre, tal cual podéis consultar en el "post" de fecha 3 de octubre de 2014.
Lo importante es que se va actuando en todo el estado y de momento la receptividad de la Inspección de Trabajo es importante.
También aquí en Catalunya contamos con la sensibilidad del Consejo de Relaciones Laborales de la Generalitat, que lo incluirá en su agenda de trabajo para el año 2015, tal cual podéis consultar en el "post" de fecha 9 de diciembre. Por parte de UGT se les hizo entrega de un informe sobre las prolongaciones de jornada en el sector, que podéis consultar en dicho "post".
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