Un compañero, con amplia y dilatada
trayectoria profesional en el desempeño de funciones con máxima
responsabilidad, ha experimentado recientemente cual es el reconocimiento de la
empresa (Banco Popular) a la que mostró dedicación y lealtad durante casi 50 años. Según los hechos probados en sentencia judicial, se le comunicó “el interés del banco de que se jubilara de forma
voluntaria, concediéndole un plazo de 48 horas para dar una contestación y que
en caso de negativa, la alternativa era la adopción de medidas de movilidad
geográfica”
Tras superar con asombro la enorme decepción
de la que consideraba “su empresa”, se asesoró adecuadamente para negarse a la jubilación
(voluntaria a los 63 años), rechazando lo que consideraba un broche humillante
a su carrera profesional. El Popular en lugar de
dar marcha atrás y reconocer la improcedencia de su actuación, inmediatamente
dispuso el traslado del compañero a una oficina alejada de su domicilio habitual,
asignándole tareas propias de un empleado de reciente ingreso.
Nuestro compañero cumplió con la nueva orden pero
interpuso demanda contra Banco Popular por acoso laboral
considerando que su nueva situación, consecuencia de su negativa a jubilarse,
tenia como único propósito humillarle para torcer su libre voluntad.
Con fecha 26 de Agosto de 2014 se dictó sentencia en el juzgado de lo social número 3 de Sevilla en la que se declara probada la vulneración del ART. 14 de la
Constitución por suponer una discriminación por razón de edad, declarándose la nulidad radical de la actuación de la empresa por
trasladarle al nuevo centro de trabajo, disponiendo la
reintegración a su puesto de trabajo con reposición de la situación anterior. Además la sentencia, atendiendo a la gravedad de los hechos, sanciona al banco con 6.125 euros en concepto de daños y perjuicios al
demandante.
Esta sentencia demuestra como determinados
abusos tienen una solución: denunciar en los tribunales.
En este caso como en tantos otros, UGT forma parte de la solución.
En este caso como en tantos otros, UGT forma parte de la solución.
Por lo que he oido parece ser que ugt hace algo parecido con sus delegados.
ResponderEliminarCompañera/o o lo que seas, pues me parece que compañera/o no debes de ser mucho. Primero, como verás, este blog no censura a nadie mientras no haya palabras mal sonantes, que en tu caso no las hay. Ahora bien, lo que haces es decir cosas que, una de dos o son mentiras (lo que supone mala leche por tu parte) o por contra, has oído, o te han dicho, o yo creía, en fin cosas todas con las que se suele embaucar a incautos sueltos de lengua. Tú mismo, colócate donde quieras.
ResponderEliminarSi te lo han dicho, di nombres. En esta sección sindical a nadie se le aparta por su edad, y te lo dice quien administra este blog, y haré algo que ya he hecho en otras ocasiones, dar mi nombre: José Ramírez López, secretario de organización de la Sección Sindical de UGT de Banco Santander en Catalunya, además de ser delegado de prevención y miembro del Comité Estatal de Seguridad y Salud en nuestro Banco. Tengo 56 años, buscando 57, y en la actualidad, tengo el honor de estar al frente de esta Sección, y aquí sigo y seguiré mientras me aguanten.
Nuestro delegado de Tarragona gtiene 63 años, nuestros delegados de Lleida pasan de los 50 y bastantes y en Girona anda cerca. ¡De que caramba nos hablas!
Por lo que compañera/o, 1º. Quien acusa se identifica (como ves yo no me oculto). 2º. Se aportan datos, por lo visto en tu comentario, no lo haces. Da nombre. Y 3º. Descalificar está al alcance de cualquiera, sobre todo si está en el anonimato. Las acusaciones se han de demostrar. Para que me entiendas, es como si por ejemplo, yo te acusara de borracha/o. Si no lo puedo demostrar, sencillamente me he de callar.
Queda claro compañera/o que ninguna de estas cosas respetas, por lo que te recomiendo que antes de "piar" te tienes que enterar.
¡Salud y menos mala leche compañero!