La Federación de
Servicios (FES) de UGT de Cantabria ha instado a la Inspección de Trabajo a
intensificar el control de los excesos de jornada laboral ilegales en las entidades
financieras y bancarias de la región, las cuales venimos denunciando desde el
pasado mes de mayo, tras una reunión de los delegados regionales del sector
financiero de UGT.
UGT aclara que
la Inspección de Trabajo ya ha planteado por ello actas de infracción a alguna
entidad bancaria de la región, insiste en que se ha convertido en una práctica ya habitual en este sector que los/as empleados/as de banca acudan a sus puestos
de trabajo fuera del horario estipulado en convenio colectivo, no existiendo
control alguno de las horas realizadas ni de la jornada laboral real de cada
uno de ellos/as.
Para UGT, no
deja de ser inaceptable esta práctica ilegal y fraudulenta de horas extras sin
remuneración ni cotización a la Seguridad Social, máxime teniendo en cuenta que en todas las entidades financieras se ha producido una masiva pérdida de empleo en los
últimos años e incluso algunas de ellas se encuentran aún en proceso de
regulación de empleo.
Desde UGT, también estamos
alertando que estos excesos de jornada ilegales están directamente relacionados
con una política generalizada de las entidades bancarias de reducir plantilla
con más carga de trabajo y objetivos a cumplir, lo que está provocando no sólo los excesos de jornada denunciados, sino también serios problemas en la salud de los/as trabajadores/as afectados/as.
En la mayor
parte de las entidades financieras se ha constatado un incremento de las bajas
laborales por incapacidad temporal (IT), generalmente por ansiedad y estrés,
que no son reconocidas de manera oficial como laborales sino como enfermedad
común, cuando están claramente asociadas a excesos de jornada y a la sobrecarga
de trabajo.
Desde UGT calculamos que más del 40% de las bajas de los/as empleados/as de banca y de entidades
financieras, que son catalogadas como enfermedad común, son en realidad bajas
laborales en toda regla y además con el inconveniente de que al no ser
vinculadas al trabajo, no existe acción preventiva alguna, con lo que se
agravarán los problemas de seguridad y salud de los trabajadores, que ya se
están dando.
Yo no comprendo como los empleados no ofrecemos una mayor resistencia a este abuso que además marca nuestras vidas, una de las ventajas que tiene trabajar en el Banco es le horario y lo estamos dilapidando con una resignación que me recuerda el pueblo judío frente a la crueldad de los nazis alemanes. Tomos somo adultos y deberíamos saber lo que hay que hacer, y quedarse por las tardes en las oficinas es precisamente lo que no se ha de hacer. ¿Miedo? ¿Miedo a qué? nos pagan un salario por trabajar un número de horas anuales, si cumplimos no hay nada que temer. Yo no vengo por las tardes y sigo manteniendo mi puesto de trabajo y mi categría profesional.
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