La banca dio por perdidos 73.065 millones de euros hasta final de 2013, cifra que excede en 9.308 millones o el 14,59% los 63.757 millones acumulados hasta el ejercicio previo.
Son los llamados
"fallidos", catalogación que reciben los activos cuando la
expectativas de recuperación son casi nulas.
El volumen se ha disparado un 129,34% desde 2009, detalla la Memoria de
Supervisión del Banco de España. Bajo este título se alojan las financiaciones
que han pasado, sin éxito, todo el proceso de recobro desde que saltan las
alarmas de apuros del cliente; y otros activos como son los préstamos
condonados.
Para tener mejor imagen del menoscabo causado por
la crisis en el balance de la banca, es preciso sumar los créditos dudosos o
morosos. La suma de fallidos y dudosos elevó el problema a 270.300 millones el
pasado año -197.235 millones eran solo dudosos-, un 17% superior a los 231.245
millones del año previo y los 125.186 millones de 2009.
A finales de 2013, el sector arrastraba 173.900
millones entre financiación problemática e inmuebles adjudicados, equivalente
al 8,2% de su balance. Solo los activos adjudicados ascendían a 79.100
millones, cubiertos con provisiones al 49% de su valor.
Cuando una operación suma tres impagos, el Banco
de España exige considerarla dudosa y comenzar a efectuar provisiones por si
deriva en un quebranto irrecuperable. En ese momento se activa toda la
maquinaria para dar facilidades al cliente a fin de que se ponga al corriente y
restaurar la calificación de "normal" a la operación: rebajas en los
intereses, ampliar el plazo de repago, refinanciaciones, etc.
Si el proceso es infructuoso pasan al cajón de fallidos y las entidades los dan de baja de los balances. En la práctica no representan riesgo alguno porque han sido provisionados en su totalidad y no devorarán más recursos. Han dejado de ser problema contable pero resultan alto expresivos de la gravedad de la crisis.
Si el proceso es infructuoso pasan al cajón de fallidos y las entidades los dan de baja de los balances. En la práctica no representan riesgo alguno porque han sido provisionados en su totalidad y no devorarán más recursos. Han dejado de ser problema contable pero resultan alto expresivos de la gravedad de la crisis.
No hay comentarios:
Publicar un comentario