ENCUESTAS Y REALIDADES

La encuesta lanzada por Banco Santander a todos los empleados del Grupo para conocer de primera mano el grado de satisfacción en su trabajo supone una oportunidad que no podemos desaprovechar.

Dentro del Plan Director de Recursos Humanos, el Banco nos ha remitido a todos los trabajadores del Grupo una encuesta que pretende ser una radiografía del clima laboral y social que se vive en el Banco. La encuesta realizada anteriormente, cuyos resultados fueron presentados al tiempo que se exponía el nuevo Plan Director, ofrecía algunos datos muy relevantes sobre el grado de satisfacción de las plantillas. El resultado ha reflejado muchas de las reclamaciones, reivindicaciones y quejas que UGT ha venido denunciando durante años, sin que el Banco asumiera ninguna responsabilidad.

Sin embargo, estos resultados han hecho reflexionar al Banco sobre la necesidad de acometer cambios, al tiempo que proclama que los trabajadores somos la clave para alcanzar la meta de recuperar la rentabilidad perdida a lo largo de la crisis.

Para que esas intenciones no queden, una vez más, en el limbo de las declaraciones ostentosas carentes de contenido, es necesario que los datos revelen la realidad de lo que acontece día a día en nuestro trabajo.

La participación es un elemento fundamental, la confidencialidad está garantizada, pero lo es mucho más que las respuestas reflejen con nitidez la situación de deterioro que está sufriendo el clima laboral.

Las prolongaciones de jornada que conllevan un nulo cumplimiento del compromiso de conciliación; la eliminación o congelación de los complementos voluntarios; las calificaciones profesionales, basadas en parámetros subjetivos que dificultan cuando no cercenan la carrera profesional; una presión comercial desorbitada, basada en los productos en lugar de los clientes; la individualización del trabajo en menoscabo del equipo, son sólo algunos de los males que afectan negativamente al clima laboral.

Una encuesta cuyo objetivo pretende ser una respuesta que aumente la satisfacción y vinculación de los trabajadores hacía la Empresa, tiene que asegurar participación y compromiso de cumplimiento. En nuestras manos está exponer la realidad y en las del Banco cambiarla.