Desde UGT venimos demandando hace tiempo, incluso
antes de producirse la fusión Santander-Banesto, la eliminación de la cláusula suelo
en los préstamos hipotecarios.
En estos días hemos visto como diversos medios de comunicación
anunciaban la decisión de Banco Santander de dejar de aplicar la cláusula suelo
a los clientes de Banesto con efectos desde el 1 de julio de 2013.
Esta decisión que aplaudimos y valoramos
positivamente, supone sin embargo ahondar en el malestar de los trabajadores
por el agravio comparativo que se produce con la política relativa a la cartera
de préstamos hipotecarios del personal.
La sociedad en su conjunto demanda en estos momentos de
grandes dificultades, un gesto por parte de las Entidades Financieras del que no pueden quedar al margen sus empleados.
Nos hemos dirigido al Banco solicitando, de nuevo y
ante el anuncio realizado, la adecuación de los préstamos hipotecarios de los
empleados a la realidad social y financiera, a la vez que sirva para evitar los agravios
comparativos que afectan a la plantilla, que nadie debe olvidar también somo clientes.
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