La justicia brasileña ha suspendido los despidos sin causa justificada del Banco Santander, bajo multa diaria de 100.000 reales (36.000 euros). La sentencia fue promulgada por la jueza Rilma Aparecida Hemetério, en un acto de conciliación entre el banco y el sindicato de los empleados de Banca de São Paulo, Osasco y Región. El sindicato hizo la petición ante la sospecha de que el Santander iba a despedir a casi 5.000 trabajadores esta semana en todo el país. El banco, que no quiso pronunciarse sobre números esta semana, manifestó en la audiencia que en diciembre ha despedido a 415 empleados de São Paulo, pero dijo no tener datos sobre otras regiones. En todo el país el Santander tiene una plantilla de 55.000 empleados.
Según el sindicato, sin embargo, los despidos habrían sumado al menos el millar esta semana. El Santander había negado la información diciendo que “no corresponden a la realidad” y añadió que haría un ajuste de plantilla “para adecuarla al contexto competitivo de la industria”. El representante del banco, Alessandro Tomao, señaló ayer que la entidad no comunicó antes el número por entender que estaba dentro de lo normal “es incluso un 15% inferior al del mismo periodo del año pasado”, dijo.
La presidenta del sindicato celebró la sentencia y subrayo que “es la primera vez que el banco pone datos concretos sobre la mesa”. De momento ésta ha sido la primera audiencia del acto de conciliación. Ambas partes deberán reunirse de nuevo el martes próximo.
Bravo por la jueza Rilma Aparecida, y mucha fuerza a nuestros compañeros de Brasil
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