lunes, 26 de noviembre de 2012

Despidos masivos en las cajas nacionalizadas

Bruselas tiene prácticamente listo el documento relativo a las ayudas públicas en el que se acuerda la reestructuración de las cajas, ya bancos, que han sido nacionalizados. Los números ya están claros. Las estimaciones del documento que prepara Bruselas suponen un recorte de 8.000 empleos en Bankia y Novagalicia –casi 6.000 en Bankia y el resto en la entidad gallega, entre despidos directos y recortes de plantilla aparejados a la venta o cierre de filiales—, y la eliminación de cerca de 1.000 oficinas, según fuentes próximas a las negociaciones, que confirmaron ayer fuentes europeas. A esa cifra hay que sumar 1.000 despidos más en CatalunyaCaixa, aunque Bruselas puede condicionar ese tijeretazo a su venta a un competidor. Desde 2008, 22.000 trabajadores han perdido su puesto de trabajo en las cajas, donde ahora trabajan unas 110.000 personas. Tras esta poda, la plantilla de las antiguas cajas quedará ligeramente por encima de los 100.000 empleos.

No solo se trata de despidos. A cambio de las ayudas, Bruselas quiere una reestructuración integral, para que las entidades que reciban fondos públicos queden totalmente saneadas y a la vez no compitan en condiciones ventajosas frente a sus competidores. Las entidades con ayudas deberán concentrar su negocio en sus regiones de procedencia y en la banca familiar, en una especie de vuelta a los orígenes. Y deberán vender buena parte del resto de negocio en poco tiempo. CatalunyaCaixa y el Banco de Valencia están en proceso de subasta, por lo que los recortes se aplicarán al comprador.
Los planes definitivos se conocerán poco antes del mediodía del próximo miércoles. Joaquín Almunia, comisario de Competencia y vicepresidente de la Comisión, hará público en Bruselas el documento definitivo con las condiciones que tienen que aplicar cada una de las cuatro entidades, así como el capital definitivo que se les inyectará. El fondo de rescate, el FROB, recibirá el dinero de Europa el 15 de diciembre, y lo ingresará en las entidades el 30 de diciembre, a tiempo para cuadrar las cuentas de 2012.
Es curioso que Bruselas no exija que devuelvan sus bonus los directivos que se enriquecieron, ni que pierdan dinero los grandes accionistas de Bankia. Exige que se eche a la calle a 8.000 empleados. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario