El consejero delegado de Banco Santander, Javier Marín, ha
dado casi por seguro que el grupo español no adquirirá la filial
de Barclays en España, la última operación significativa que sigue
sobre la mesa en el sistema financiero español después de que BBVA se haya
hecho con CatalunyaCaixa.
Tal y como señaló en la presentación de resultados del grupo,
Barclays "no es un target claro que nos pueda añadir valor", si bien
ha asegurado que se mirarán todas las oportunidades que surjan. El objetivo del
Santander sigue pasando, ha defendido, por el crecimiento orgánico.
En ese sentido, Marín tampoco se ha rasgado las vestiduras
por no haber ganado la subasta de CatalunyaCaixa, en la que el Santander partía
como uno de los grandes favoritos. "No nos hemos equivocado con los
cálculos" a la hora de presentar la oferta, ha defendido, sino que se
tuvieron en cuenta los posibles riesgos. No obstante, ha confirmado que él
mismo personalmente felicitó a través de un e-Mail al consejero delegado de
BBVA, Ángel Cano, por la compra de la entidad catalana.
El consejero delegado del Santander ha reconocido que el
banco tiene como objetivo ganar cuota de mercado en Cataluña, especialmente en
el segmento de particulares, si bien apostará por un crecimiento orgánico. En
ese sentido, no descarta la apertura de nuevas oficinas en la región si lo
considera necesario.
Antes de abrir más oficinas, lo que deberían de hacer es
dotar de más personal a las mismas, para poder ofrecer una mejor atención a los
clientes. Hace ya años que las plantillas están por los suelos en esta
comunidad y aunque se han cerrado oficinas, el ingente número de prejubilaciones
que ha habido ha dejado la situación igual o peor. Esta dramática situación
queda enmascarada por las prolongaciones de jornada. Si la plantilla realizara
la jornada legal, es decir por el tiempo que le pagan, la insuficiencia de
personal quedaría planteada con toda su crudeza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario